PAUSAS

Llevo más de un mes sin escribir.

No sé, no me ha nacido.

Bueno, en realidad sí sé.

He estado un poco en modo pausa.

Entendiendo muchas cosas que han sucedido estos dos años.

Y a nivel interno, he necesitado hacer esa pausa.

De eso va mi blog, ‘La pausa de la felicidad’, ¿no?

En mi caso, no podría decir que he pausado para llegar a la felicidad.

Sería un más bien, para acercarme más a ella.

Siempre digo que, este tipo de parones son más que necesarios.

Y mira, esta vez, he necesitado hacerlo este último mes.

No era algo que tuviera pensado, pero ha surgido así.

Muy diferente a los que hago cuando acaba o empieza un año/ciclo, que me gusta analizar.

Pero creo que más necesario que esos, al menos, para mí.

Batiburrio emocional de nuevo, es lo que hay.

Pero cada vez estoy más encaminada a coger todo esto de la mano.

Para que me acompañe en mi vida.

Para que me ayude a creer como persona.

Para que pueda avanzar sin perder mi calma y mi estabilidad emocional.

Y mira, hoy me ha dado por abrir una página en blanco y fluir.

No lo he hecho de manera consciente, pero si lo pienso, sé porqué mi cuerpo me lo ha pedido.

Mañana es mi cumpleaños.

Y yo no podía acabar mis 32 sin acabar de soltar.

Empezar los 33 soltando lo viejo, no mola.

Así que, aquí estoy.

Y sí, seguiré soltando, aprendiendo y estabilizando mis emociones siempre.

Es imposible para mí no hacerlo.

Pero mi blog se merecía este pequeño fragmento.

Y mi cabeza la sensación de haber fluido con palabras por última vez de este año mío.

De hoy a mañana cambiará poco.

Pero la mente va por libre y quizá no nos dice eso.

Así que, aquí está, el artículo más corto que he escrito y que escribiré.

En modo de despedida de mis 32 años.

Para dar la bienvenida a esos 33 tan esperados.

Fluyendo y con ganas de ver todo lo que me espera un año más.

Con los nervios a flor de piel, como siempre.

Y con la actitud por las nubes para todo lo que esté por venir.

Espero que tu día vaya genial (sea cuando sea que me leas).

Y que el mío de mañana vaya mejor aún que cualquier otro.

Hoy poca reflexión te dejo.

Más bien, un recordatorio.

El que entiendas que las pausas son siempre necesarias.

Así como el no esperar a que la vida te obligue a hacerlas.

Drew,