RECONOCERTE

Hoy quiero hablar de la gente.

Así, en general.

De la sociedad.

Qué poco nos gustan los cambios.

Y cuánto las rutinas.

Maldita zona de confort.

A veces es ‘buena’, quién sabe.

Te contaré que, las rutinas y yo, nunca nos hemos llevado muy bien.

Sí cuando vivía el 100% de mi vida en total automático.

Pero ya no.

Ya te conté que hace un tiempo que decidí cambiar eso.

Bueno, muchas cosas.

Los cambios no han solido asustarme.

Por norma general, porque alguno habrá que sí.

Pero, me refiero a que, nunca he sido la típica persona que ha dicho que no a algo solo porque llevara consigo un cambio.

Si hay que cambiar, se cambia.

En cualquier ámbito de la vida.

Llámese cambio, adaptación, modificación, o como más te guste.

Y parece que, esto en la sociedad se ve como raro.

No estamos acostumbrados ni a cambiar nosotros ni a que nuestro entorno lo haga.

Y sí, a veces pasa.

En mi opinión, menos de lo que debería.

Porque el cambio da miedo.

Y el miedo, solo nos lleva a tener más miedo y a seguir igual.

Es decir, en nuestra zona de confort.

Pues que quieres que te diga, creo que haces ‘mal’.

Bueno, 'mal' o 'bien', lo haces como crees que mejor sabes o que mejor te va o que más bien te hace.

Y eso está bien.

Pero…

¿Realmente te conoces para saber todo eso?

Creo que ahí está la cosa.

Los seres humanos nos conocemos poco.

Pasamos más tiempo de nuestra vida intentando conocer a otros que conociéndonos a nosotros mismos.

No tengo pruebas, pero estoy segura.

Y ¿qué pasa cuándo intentas conocerte a ti?

Que se ve raro.

Puede ser, sí.

Pero se ve raro porque nos han dicho que es así.

Que eso no es lo normal.

Pero a mí, me ha dado bastante igual eso.

Siempre he dicho que ser rara es un piropo.

Todos iguales, ¿para qué?

Prefiero ser rara y diferente.

En fin, que conocerse a uno mismo es lo que deberíamos hacer todos.

Centrarnos en nosotros en lugar de seguir con el foco en nuestro entorno.

Quizá nos iría a todos mejor.

Quien sabe, igual un día lo normal llega a ser eso y el raro es el que no se conoce.

Ojalá.

Porque solo si te conoces, lograrás reconocerte.

Reconocerte en todos los aspectos.

Yo, me he dado cuenta de que me estaba empezando a conocer.

Pero que toda mi vida he estado en un cuerpo de una persona a quien no conocía.

Es jodido reconocer que no te conoces.

Pero igualmente necesario.

Y conocerte no es cosa de un día.

Lleva un gran trabajo detrás.

No pasa nada si crees que no lo logras.

No pares.

Conócete y reconócete.

Ese es mi consejo de hoy.

Y que te centres en ti y solo en ti.

Sí, es más fácil buscar problemas en otros que mirar hacia dentro y ser consciente de los nuestros.

Pero lo veo cobarde y egoísta.

No me enrollo más.

Si decides conocerte y reconocerte al nivel que cualquier humano debería, siempre podemos comentar sensaciones.

Y recuerda que, todo lo que comparto contigo es simplemente una opinión propia fundada bajo mi experiencia.

Drew,